Estamos ante un pastel muy especial. Cualquiera que tenga un negocio asentará con le cabeza porque sabe lo que es levantarse por la mañana y tirar cada día para levantar tu sueño. Así que estamos ante el pastel perfecto, tu vida, tu mundo....todo lo que te rodea a diario está ahí. El cariño de la persona que te lo regala está ahí. Tu trabajo está ahí. Y, por supuesto, el lado más dulce del día a día está ahí reflejado.
Sencilla pero con agarre puesto que aquel que la vea pensará: "tengo que ir a visitar esa frutería y disfrutar de sus productos".
El logotipo de la tienda es muy gracioso porque es una naranja feliz e irradia simpatía por los cuatro costados.
Alrededor le hice unas hojas imitando un poco a las de las naranjas y clementinas. Como veis hay que jugar con los colores para que todo quede parejo y no resalte una cosa sobre la otra que nos parezca que no pega ni con cola.
Félix, el encargado de la sorpresa, eligió: "Muchísimas felicidades Naty" para añadir a la decoración. Se nota que lo decía con todo el cariño.
Aquí os dejo un detalle de la naranja feliz, con pecas y todo.
Para que veáis siempre os intento poner el original porque me gusta comparar y que comparéis.
Espero que os haya gustado, a ella le hizo mucha ilusión.
Gracias por estar ahí a tod@s. Hasta la semana que viene!
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